Todo comenzó obsesionándome con mi físico, quería gustar a los demás y por supuesto, aceptarme a mi misma y sé que eso era el paso más difícil de todos. Quería adelgazar pero ya no sabia como hacerlo porque había perdido el control en la comida. Llevo años subiendo y bajando grandes diferencias de peso.
Después de estas diferencias pasé de 69 kg a bajar a 60 en poco tiempo y con ayuda.
Decidí hacer dieta y ejercicio saludable; Funcionó muy bien para comenzar...
Iba al gimnasio cada día y hacía spinning sin parar. No paraba quieta en todo el día. Así me mantuve un tiempo largo.
Cada vez me fui restringiendo de muchas comidas, demasiadas. Era demasiado estricta con la comida y con el deporte, no podía controlarlo... Hasta que un día, en Verano de 2013 cuando un día decidí ir a la playa con los amigos me desmayé en la playa y mi tensión no era normal. Tuve la suerte de tener gente a mi alrededor que me ayudase y me volví a incorporar de nuevo... Lo sucedido quedó entre mis amigas y yo.
Después del verano a principios de curso empecé a olvidarme ''un poco'' de las dietas y el ejercicio, empezaba a cansarme, consumirme y quise darme un descanso porque ya no aguantaba más. Hasta que una estúpida crítica ''Con un par de quilos menos estaría perfecta'' hizo pesarme de nuevo. Observé con tristeza la báscula puesto que gané 5 kg, de nuevo. A partir de ahí es cuando mi vida cambió totalmente. Mi físico pasó a ser una prioridad en mi vida, una obsesión de la cual era imposible quitarme y deshacerme de eso. Empecé a vomitar y a dejar de comer hasta que finalmente mis padres se enteraron de eso y quisieron tomar medidas internándome en un hospital de día. Su preocupación me impulsó a controlarme por unos días más, a aceptar que necesitaba ayuda y que la iba a tener. Lo mío no es bulimia, no... Yo nunca me he dado atracones para luego vomitar. He estado toda mi vida haciendo dietas. Llegué a ser capaz de inventarme excusas para salir fuera de casa con el propósito de no comer absolutamente nada en todo el día y para el colmo, si comía algo por más pocas calorías que tuviera, me sentía culpable y las vomitaba. Habían días en los que me levantaba y veía partes del cuerpo mucho más grandes y aumentadas que el día anterior, como si hubiese engordado de un día para otro 3/4 kg más. No solo me hacía sentir culpable si comía cosas que engordasen, si no que solo la idea de ''comer algo'' por sano y poco que sea, ya me hacía sentir mal. A veces sentía que solo me quedaba aire en el cuerpo y eso me estaba debilitando para hacer la rutina de cada día. Nunca he querido ser un saco de huesos, tener anorexia no significa querer tener un cuerpo super delgado.. Adelgacé estos 5 kg en muy poco tiempo. Y esto es lo que lleva siendo mi obsesión con mi físico desde hace dos años.
Mañana empiezo la terapia en el hospital y espero que esto mejore pronto. No solo por mi, si no también por mi familia y mi pareja que siento en el alma hacerles pasar por esto. Diría que tengo miedo de empezarlo por lo que voy a encontrarme allí... Pero la verdad es que no, estoy dispuesta a cualquier cosa con tal de mejorar esto y que mi vida vuelva a la normalidad.
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